Síndrome de Apnea e Hipoapnea Obstructivas del Sueño (SAHOS)
¿Qué es la Apnea e Hipoapnea Obstructivas del Sueño (SAHOS)?
La apnea obstructiva del sueño consiste en el cierre de la vía aérea superior mientras dormimos y el ronquido es un gran avisador de que esto puede estar sucediendo. La otorrinolaringología es la especialidad médica que se dedica al estudio de los fenómenos que ocurren en todos los niveles de la vía aérea superior a nivel fisiológico y fisiopatológico. Gracias a esto, surge la Cirugía de Sueño, que consiste en un número importante procedimientos que permiten la permeabilidad de la misma (nariz, nasofaringe, orofaringe, hipofaringe y laringe) y garantizar la oxigenación del cerebro y órganos vitales durante el sueño, período en el que nuestro organismo lejos de descansar, se encarga de recuperarse, ordenarse y reiniciarse, para nuestro adecuado funcionamiento.
El Síndrome de apneas-hipopneas obstructivas del sueño (SAHOS): una definición etimológica sería, el conjunto de síntomas y signos, que se presentan en un paciente, debido a la detención de la respiración o a la disminución del flujo respiratorio como consecuencia de la obstrucción total o parcial, respectivamente, de las vías aéreas superiores; y que ocurre cuando la persona duerme.
SAHOS “Es un cuadro de somnolencia excesiva, trastornos cognitivo-conductuales, respiratorias, cardiacos, metabólicos, o inflamatorios secundarios a episodios repetidos de obstrucción de la vía aérea superior durante el sueño.” (Sociedad Española de Sueño. Tratado de Medicina del Sueño. Ed Panamericana. 2015)
¿Cómo y por qué se produce la Apnea e Hipoapnea Obstructivas del Sueño (SAHOS)?
Intenta dejar de respirar por un minuto y verás todo lo que ocurre. Eso mismo, y más, ocurre hasta por varios minutos en las personas que padecen de apnea del sueño. Lo peor es que ocurre toda la noche, todos los días. En fin siempre que duerme.
¿Qué síntomas presenta una persona que sufre de Apnea e Hipoapnea Obstructivas del Sueño (SAHOS)?
- Alteraciones en la respiración durante el sueño: ronquidos, jadeos y apneas.
- Sueño entrecortado: Despertares frecuentes, mal dormir, sueño inquieto. Son esas personas que a pesar de que duermen toda la noche, y hasta en el día, están muy cansados y dicen que no duermen nada, ganas de orinar en la noche.
- Síntomas diurnos: somnolencia, fatiga, ánimo bajo, depresión e irritabilidad, disminución de la libido.
- Deterioro evidente en la ejecución de las tareas cotidianas que afecta la calidad de vida del paciente; surgen dificultades en su trabajo, en su interacción social y en sus funciones sexuales.
¿Sufro yo de esa enfermedad?
Muchas pruebas y cuestionarios se han diseñado para detectar a estos enfermos.
Uno de ellos plantea que tiene alta probabilidad de sufrir AOS toda persona que cumpla las 3 siguientes condiciones:
COMPROBAR SI TIENE RIESGO DE PADECER DE ESTA CONDICIÓN
¿Quiénes tienen riesgo de padecer este problema?
- Todo aquello que haga que la vía aérea en la garganta sea más estrecha, puede causar ese problema. También lo que relaje nuestra musculatura. La obesidad y el cuello grueso o gordo es la causa más frecuente.
- El sexo masculino, se debe a que en el hombre la grasa se deposita en el centro del cuerpo, incluyendo el área del cuello.
- La menopausia.
- Rasgos y anormalidades cráneo-faciales en los tejidos blandos y duros (adenoides, amígdalas hipertróficas, pólipos nasales, micrognatia, retrognatia, macroglosia, etc.). Enfermedades como disfunciones cardiopulmonares, diabetes, hipotonía muscular como se observa en problemas del cerebro (ictus o accidente cerebrovascular) o nerviosos, síndrome de Down, etc.
- El cigarrillo, alcohol o medicamentos sedantes (pastillas para dormir).
- El envejecimiento.
¿Qué complicaciones puede tener alguien que tenga apnea obstructiva del sueño? ¿Es grave?
En forma ocasional, toda la población puede experimentar ronquidos, apneas e hipopneas muy leves, durante el sueño. Si estas se hacen muy frecuentes y prolongadas es posible que sea Apnea Obstructiva del Sueño.
La asfixia y sus consecuencias pueden complicarse con:
- Hipertensión
- Enfermedad cardiaca isquémica (infartos, anginas): "Roncar todas las noches" aumenta cuatro veces las probabilidades de tener un infarto
- Disfunciones al miocardio (insuficiencia cardiaca) y arritmias (fibrilación auricular, personas con marcapasos y cualquier otra braquicardia, taquicardia y arritmias cardiacas severas)
- Enfermedades cerebrovasculares (ictus, “derrame cerebral”)
- Depresión
- Ansiedad
- Irritabilidad
- Funcionamiento social, laboral, intelectual y sexual
- Aprendizaje
- Memoria (amnesia)
- Atención (déficit de atención, pobre desempeño laboral, accidentes)
- Procesamiento de la información (bajo rendimiento académico)
- Coordinación psicomotriz
- Conflictos matrimoniales y familiares
- Somnolencia diurna
- Accidentes de tránsito y laborales (es la primera causa en los países desarrollados)
¿Cuáles son las Prueba Médicas para diagnosticar la apnea del sueño?
El diagnóstico definitivo se logra con la POLISOMNOGRAFÍA Nocturna:
En la Clínica del Sueño: El paciente, mientras duerme, es conectado a una máquina (polisomnógrafo) que graba varios datos (relacionados con el sueño, la actividad cardiaca, respiratoria, cerebral y muscular) que ayudan al médico a establecer el diagnóstico de apneas (obstructivas, centrales, hipopneas y resistencia en la vía aérea). El paciente se queda a dormir en un laboratorio del sueño. En una habitación cómoda, segura, silenciosa, muy parecida a su casa. Un técnico le coloca algunos sensores en diferentes partes del cuerpo y el paciente se acuesta a dormir, mientras se registran los datos necesarios para el diagnóstico.
Polisomnografia o estudio del sueño en la comodidad de su hogar: un profesional instalará el equipo, consiste en un registro que mide el pulso, el nivel de oxígeno en sangre, el flujo de aire y los patrones de respiración, entre otros. Por el hecho de no estar monitorizado, y si la persona no duerme normalmente (muy probable por el solo hecho de dormir con el equipo y en condiciones inusuales), pueden haber falsos negativos. Casos en los que el estudio parece normal aun cuando el paciente tiene el problema.
En todo caso, debe hacerse un estudio completo del paciente y contamos con los mejores especialistas para evaluar su caso clínico y necesidad de los estudios correspondientes.
Es importante establecer claramente la enfermedad de la apnea con el fin de derivar al paciente, al especialista correspondiente en caso de que sea necesario (por ejemplo; otorrinolaringólogo, odontólogo, neumólogo, neurólogo o especialista en medicina del sueño).
Tratamiento para la apnea del sueño
Se ha demostrado que el tratamiento efectivo de primera elección para esta enfermedad es la CPAP o Presión positiva continua en la vía aérea (las siglas proviene del inglés continuous positive airway pressure)
Un CPAP es una máquina pequeña que abre la vía aérea al suplir aire a presión. Una vez hecho el diagnóstico de la apnea del sueño y titulada la presión necesaria en el CPAP, el paciente debe comenzar a usar su equipo siempre que duerma; para lo cual se debe escoger el equipo y la máscara más apropiados para ese paciente. Es como los zapatos, NO todos “quedan” igual o es una terapia estándar (la misma para todos). NO es algo que se pueda compar por internet sin una evaluación previa. A ti no se te ocurriría “comprar” una apendicectomía (cirugía de la apendicitis) por internet.
El CPAP puede ayudar a estas personas a adelgazar ya que les permite tener actividad física y mejora las alteraciones hormonales que lo hacen engordar.
Acomodar la posición durante el sueño (dormir de costado y no de espaldas). Efectivo solo en casos leves y claramente posicionales (evidenciado con un estudio del sueño).
Suprimir el tabaquismo y la ingesta de alcohol, sedantes, antihistamínicos, relajantes e hipnóticos; pueden ser tratamientos adyuvantes a la CPAP.
Dispositivos orales para la lengua o avance mandibular, con el fin de que ésta no se desplace en la cavidad orofaríngea. Tales aparatos son tolerados y efectivos solo en los casos en los que se diagnostique una malformación que se puede corregir con estos dispositivos.
– Ningún medicamento ha demostrado ser efectivo.
Tratamiento Quirúrgico
El tratamiento quirúrgico de la Apnea Obstructiva del Sueño, está dirigido a tratar cualquier perturbación en la vía aérea superior, que esté generando turbulencia paso de aire (ronquido) y/o obstrucción. La cirugía para la apnea obstructiva del sueño, ha visto una evolución importante en los últimos 25 años, en donde se ha determinado que una sola técnica quirúrgica no funciona para todo el mundo, por el contrario, se busca ajustar los procedimientos a la necesidad de cada paciente, variando desde la adenoamigdalectomía (extracción de las amígdalas y adenoides) que es el procedimiento más común en niños, hasta cirugías multinivel que puede incluir septoplastias, turbinoplastías, faringoplastias de expansión lateral, cirugía de amígdalas linguales, base de lengua, epiglotis, implantes de estimulación del nervio hipogloso dependiendo del nivel de obstrucción en los adultos, con hasta un 70-80% de éxito, complementando con terapias multiespecialidad para un abordaje más completo de la enfermedad.
Para identificar y cuantificar estos defectos, existen métodos diagnósticos como la endoscopia de sueño inducido bajo sedación (DISE/Somnoscopia) y cine resonancia magnética, que nos permite observar directamente cuál estructura genera el problema, para poder tomar decisiones quirúrgicas ajustadas a la corrección del defecto anatómico que esté favoreciendo el problema, buscando así, dar un tratamiento personalizado, según la necesidad.
La terapia deberá orientarse siempre a resolver el problema que ocasiona la enfermedad. Por ejemplo, si el problema es adenoides o amígdalas hipertróficas (o cualquier deformidad que condicione la obstrucción) la resolución puede ser quirúrgica. Consiste en la corrección de la vía aérea nasofaríngea, o maxilofacial. Adenoidectomía y amigdalectomía. La uvulofaringoplastía ha sido una terapia muy usada pero que NO ha demostrado utilidad cuando se compara con el CPAP y la medicina basada en la evidencia recomienda no hacerla.
¿Me acostumbraré a dormir con el CPAP?
Estas son muy frecuentes preguntas que la gente se hace sobre el CPAP. Ciertamente esa máquina no es natural. Tampoco, y mucho menos lo son las medicinas y las cirugías.
Este aparato solo meterá aire, el mismo aire del ambiente. De hecho es más limpio, ya que la máquina tiene una serie de filtros. No usa oxígeno (pero aquellos pacientes que lo ameriten se puede suplementar al CPAP). La diferencia es que lo introduce en nuestras vías aéreas a presión.
Las personas que tiene SAHOS y usan el CPAP, en vez de sentirse incómodos (que ciertamente le podría ocurrir los primeros días) por fin podrán dormir y se sentirán muy bien. Se sentirán tan bien que nunca querrán dejarlo.
¿COMPLICACIONES EL USO DEL CPAP? (EFECTOS ADVERSOS, CONTRAINDICACIONES)
Como todo, tiene sus precauciones, complicaciones e incluso no se debe usar en algunas personas. NO DEBEN USAR CPAP todos aquellos que tengan alguna de las siguientes condiciones:
- Enfermedad pulmonar bulosa
- Fístulas de vías aéreas
- Neumotórax
- Shock o hipotensión severa
Algunos pocos efectos adversos pueden registrarse con el uso del CPAP. Casi todos son transitorios o se pueden evitar. Tales como: resequedad de la mucosa nasal (se evita con un humidificador), incomodidad (se evita con un equipo más cómodo y en todo caso suele ser transitorio), resequedad de los ojos (se evita con una máscara más cómoda), lesiones por presión en el lugar donde se apoya la máscara (se evita con una máscara más cómoda). Como todo equipo eléctrico debe tener sus cuidados para evitar riesgo de electrocución.